Rincones de Kioto: los campos de arroz y el contraste entre lo tradicional y lo moderno

Estándar

Donde menos te lo esperas, entre montones de edificios, hay un campo sembrado de arroz o un pequeño huerto. ¡Y crecen muy rápido! ¡En solo un mes los vimos tanto empezar a brotar la mata como dar arroz!

Es una forma perfecta de encontrar el equilibrio entre la gran ciudad con su gran movimiento y tecnología, y la naturaleza, con su paz y tranquilidad.

Un aprovechamiento del terreno y un contraste de paisajes maravillosos.

IMG_20160720_140900760

Campos de arroz en plena ciudad de Kioto. / Foto: Irene Peris Martínez

Kioto es así. Modernismo por un lado, muchísima tradición por el otro.

Grandes y modernos edificios junto a antiquísimas y preciosas casas tradicionales.

IMG_20160716_155924436 (2)

Kioto. / Foto: Irene Peris Martínez

 

Espero que os guste este pedacito la antigua capital nipona. Poco a poco os iré trayendo más.

じゃーね!

¡Hasta pronto!

10 razones por las que estudiar japonés

Estándar

みなさん今日は! (Minasan, Konnichi wa!) 

¡Buenas tardes a todos!

En esta ocasión me gustaría animar a estudiar japonés a todo aquel que se lo haya planteado alguna vez. Para convenceros, voy a exponer 10 motivos que considero fundamentales:

1. Viajar. Sí, sabemos que el inglés abre muchas puertas, pero seamos realistas, no se habla en todas partes, y cuando uno viaja, es para conocer el destino en profundidad y hablar con todo el que nos crucemos y pueda enseñarnos mil cosas. Es por eso que, si queréis ir a Japón y empaparos, ¡no os queda otra!

i don't speak english

2. ¡Dejar a tus amigos y familiares (que no hablan el idioma) ojipláticos y boquiabérticos! Pues claro, ¿a quién no le gusta eso? Sobretodo cuando llevan mucho tiempo insistiendo en que digas algo en japonés, te niegas porque no sabes qué decir, y un día, casualmente, os encontráis con un amigo japonés, lo saludas en su idioma y…. ¡chan chaaaaaan!

amazing

3. Trabajo. Hoy día ya es fundamental hablar, al menos, un idioma extranjero para todo: para estudiar, para viajar y, sobretodo, para trabajar. Por lo general, suele elegirse el inglés por los motivos que todos sabemos, pero si la mayoría aprende inglés, francés o alemán ¿cómo distinguirnos? El japonés es uno de esos idiomas que pueden abrir mil puertas, que pueden llevarte a un sitio tan preparado, eficaz y tecnológico como es Japón, y que dejará helado a cualquiera que te escuche hablarlo.

4. ¡Demostrar que se puede! ¡Sí, sí! ¡Claro que se puede! Si te gambattegusta y estás dispuesto a dedicarle tiempo, todo es posible. Puedes llevar 2, 3 o 4 años estudiándolo y pensar: «pues para lo que llevo no tengo ni idea…», pero eso no es verdad, cuando te veas en la situación de usarlo, lo harás. Y lo mejor será que te entenderán, te contestarán y… ¡NO TE LO CREERÁS! Así que… がんばってください! (ganbattekudasai) ¡Ánimo!

5. Descubrir, con sorpresa, las palabras que utilizan de tu propio idioma. Como lo oyes. Como en todo idioma, siempre hay palabras que se adaptan de otras lenguas. En japonés, hay muchas palabras adaptadas del inglés, pero eso no es una sorpresa. La sorpresa es que han adoptado palabras españolas, ¡sí! Encontramos por ejemplo: plaza (プラザ  puraza) o panadería (pan+tienda = pan+ya パン屋), entre otros.

6. Introducirse en la cultura. Creo que no hay mucho que explicar aquí. Cuando uno aprende un idioma, se sumerge de lleno en la correspondiente cultura. Al aprender estructuras, se aprende a razonar y a pensar como aquellas personas que la usan. Se cambia la mentalidad, se abre nuestros horizontes. Por mucho que estudiemos sobre la cultura de otro país, siempre nos quedarán cosas que comprender si no conocemos el idioma.

7. Series, libros, anime: mejor en V.O. Todos hemos escuchado esto en alguna ocasión. ¿Quién no tiene el típico amigo (hipster) que afirma que «en la traducción se pierde mucho»? No vamos a discutir esto ahora porque es uno de esos temas que toca mi fibra sensible como traductora (hay cosas que se pierden y otras que se ganan). Pero para todos aquellos que opinen así, este debe ser un buen motivo para aprender japonés.

8. Criticar los subtítulos de las series. Admitidlo, seáis traductores o no, os encanta, jejeje.

cejas

9.Traducir los nombres de los platos de la carta del restaurante japonés a vuestra familia y/o tratar de adivinar los ingredientes que lleva. Quien no lo haya intentado, que levante la mano.

10. Quizás el mejor de los motivos: hacer amigos inolvidables. He conocido grandes amigos procedentes de diversos países y culturas, y puedo afirmar que los amigos que he hecho del país nipón son amigos para toda la vida. Amables, atentos y muy alegres.

Espero haberos convencido. ¡Hasta la próxima!

じゃーね! (jaane!)